El equipo internacional conformado por Pedro Chumpitaz, estudiante de Ingeniería Industrial PUCP, Rachel Tan, Yun Ting Peng, Goh Chiao Xuen y Yi Ning Chia fueron premiados por el desarrollo de la propuesta más invertible y su destacado desempeño en el Global Summer School 2021. En esta entrevista, Pedro Chumpitaz, nos cuenta su experiencia en la Summer School y cómo desarrollaron la propuesta junto con sus compañeras y compañeros.
¿Qué te animó a participar de este programa?
Me enteré mediante el director de carrera, Sandro Paz. Nos compartió esta convocatoria a todos los estudiantes de Ingeniería Industrial. Había postulado antes para estudiar en Alemania, pero no obtuve respuesta. Sin embargo, fue admitido en la Universidad de Tsinghua para participar en el Summer School por un período de dos semanas aproximadamente.
¿Cómo fue la dinámica del programa?
Al inicio del programa debimos asistir a una serie de charlas magistrales. Tuvimos como ponentes al CEO de Nestlé en Asia, a profesores de la Universidad de Tsinghua, a los profesionales que construyeron estructuras para los Juegos Olímpicos y diferentes personas de renombre. Estaban orientadas a la innovación y a tomar acción frente a la Agenda 2030 de la ONU. Los participantes en el Summer School nos enfocamos en la solución de uno o más problemas de la Agenda
¿Cómo conociste a tus compañeras de trabajo?
Fue mediante una aplicación que se llama Slack, que funciona como un grupo de WhatsApp, a la que todos pertenecíamos. Hubo una suerte de convocatoria del equipo de Singapur en el que estaban Peng y Rachel. Me contacté con esta última, conversamos y así fue que entré a este grupo.
Ya en el equipo, había dos personas que hablaban chino, inglés y yo hablo inglés y español. Si bien mi inglés es bueno ellas tienen un acento diferente. Fue una experiencia fuera de lo común. Primera vez que estuve en una situación así. La interacción fue, al inicio, complicada por la diferencia horaria, ellas me llevaban doce horas aproximadamente, así que tenía que conectar a la madrugada, pero fue alucinante. La dinámica, al final, fue muy buena porque ellas estudiaban administración, así que nos dimos cuenta que ellas conocían temas que yo no y viceversa. Esta complementariedad favoreció mucho a nuestro equipo.
La idea de su propuesta ¿cómo surgió?
Se nos ocurrió mediante una lluvia de ideas porque la consigna era solucionar uno de los problemas de la agenda 2030. En un principio, buscamos solucionar la parte de educación o la parte de la lucha contra el hambre, pero, a fin de cuentas, nos centramos, primero, en desarrollar nuestro modelo de negocios. Partiendo de este, afrontaríamos uno de las problemáticas de la agenda. Fue un proceso invertido. Los otros grupos ubicaron el reto y después su modelo de negocio, pero, en nuestro caso, fue de manera invertida.
Pensando en cómo luchar contra la brecha de desigualdad nos preguntamos cómo sería la idea de contar con una aplicación y, cuando viajes, poder tener la experiencia de vivir como un local. Esa fue la premisa. Conversando salieron todas las funcionalidades de esta aplicación. Coloquialmente, nosotros lo llamábamos nuestro Tinder. Esto porque contamos con un algoritmo de correspondencia el cual, mediante un universo de usuarios, puedes encontrar uno que se asemeja a tus gustos.
De esta manera, el local que coincida con tus gustos será quien te dará el tour en su ciudad. Esa fue la propuesta inicial y de ahí desarrollamos más funciones. Por ejemplo, el sistema de recompensas que te permite ganar puntos en la aplicación o los desafíos que constaban de tomar ciertos cuestionarios acerca de la cultura del país que visitas. Si lo respondes bien obtienes descuentos en ciertos locales o restaurantes.
Sin embargo, estamos en una situación de emergencia sanitaria, entonces ¿cómo lo resolvemos? Pensamos en un tour online, inspirados en la propuesta de Samsung que, con sus celulares, se puede utilizar como unos lentes de realidad virtual y realizar un tour 360°.
Por otro lado, tenemos que hacer que sea rentable porque se tiene que mantener los servidores y al personal detrás de la aplicación. Así que pensamos en los secrets spots. Son lugares que la misma aplicación te recomienda, evidentemente, relacionados con el intercambio cultural. Asimismo, te recomienda restaurantes o atracciones del lugar. Así, se tienen recomendaciones de la misma comunidad, pero también de la publicidad. Esa es la propuesta de la app.
¿Cómo se dividieron el trabajo para el desarrollo de la idea?
Nos trazamos metas con entregables con plazo de dos o tres días. Nos dieron una rúbrica que dividimos en retos y cada uno presentaba sus avances. Cada dos o tres días, según nuestras responsabilidades, nos reuníamos a las 00:00 hora peruana.
La división de los roles dependía de quién dominaba más el tema. Por ejemplo, yo lideré la parte del modelo de negocio por lo que yo sabía el modelo canvas. Debíamos hacer un modelo de negocio simplificado. Ese fue uno de los grandes aportes de nuestra propuesto. Aprovechando que recién lo habían enseñado en la universidad y ya lo estaba aplicando.
Otra parte fue la del prototipado. Debíamos mostrar cómo funcionaba la aplicación. Peng y Rachel lideraron esa parte. Ellas sabían hacerlo con Figma. Nosotros complementábamos su trabajo con otras funcionalidades. Por ejemplo, la idea del sistema de recompensas nació por el prototipado. Vimos la necesidad de enganchar a la gente y ahí calzaban las recompensas y descuentos. Así nos dividimos.
Expusimos nuestra propuesta dos veces. La primera fue con el jurado. Cuando ganamos nos dijeron que debíamos presentarnos en la clausura ante los directivos de la ONU de la agenda 2030 y los profesores de la Universidad de Tsinghuan. Esta no estaba calificada, pero se presentaban todos los trabajos más destacados.
¿Qué comentarios hicieron los jurados sobre su propuesta?
Mencionaron que era una propuesta en la que ya se podía invertir y sacarla adelante. Solo haría falta un equipo de diseño para ofrecerla al mercado. Es decir, estaba muy bien aplicado el modelo de negocios. Esta fue la primera impresión del jurado. Además, nos dijo que no había una app que integrara todas estas funcionalidades y que te permitiera vivir como un local. Nos felicitaron también los profesores de la Universidad de Tsinhguan por todo el modelo. Al ser una propuesta en la que se pueda invertir, innovadora y que ataque una de las problemáticas de la agenda 2030 tuvo mucho peso por sobre las demás.
¿Qué aprendiste en esta experiencia?
Fue muy gratificante, conocí a gente con diferentes backgrounds. No eran solo personas de pregrado, sino también de maestría o candidatos a un PhD. Convivir con una gran variedad de personas fue muy grato. Había gente con mucha experiencia y quienes aprovechábamos en aprender de ellos también.
Nos comunicábamos solo mediante el inglés, así que tenías que dominar el idioma sí o sí. Aparte de esto, tener la oportunidad de conversar con varios CEOs y gente importante de Asia hizo que esta experiencia sea increíble. Hicimos un tour virtual por las instalaciones de Huawei en la que pudimos compartir con sus analistas.
Allá están diez pasos adelante de lo que podemos estar en esta parte del planeta. Por ejemplo, ellos ya cuentan con 6G, mientras que nosotros aún nos mantenemos en el 5G. Fue un gran choque. Asimismo, tuve la oportunidad de ampliar mi red de contactos, ya que aún mantengo comunicación con Rachel y Peng. Hay contactos con los que, después de la Summer School, se pueden compartir conocimientos e información.
¿Algún mensaje para los estudiantes de la FCI?
El mensaje principal sería que se atrevan a entrar a cursos extracurriculares. Si bien no te dan créditos para convalidar te nutren a un nivel personal y académico. Sin importar si la experiencia es corta o larga hay que aprovecharlas. Sobre todo, porque hay oportunidades que son exclusivas para alumnos de nuestra universidad. Además, confiar en los conocimientos que nos brindan. Estamos preparados para rendir tanto a nivel nacional e internacional.
¿Cuáles son tus planes a largo plazo?
Me estoy dirigiendo al área de planeación. Actualmente estoy practicando en esa área, así que creo que voy a seguir por el momento. Antes estaba con el apartado de finanzas, pero lo bueno de la carrera es que puedes encontrar diversos intereses y desarrollarte en esos ámbitos.
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