Los techos verdes son un tipo de cubierta en la que en un ámbito urbano podemos incluir vegetación, ya sea decorativa o para la producción de comida. La construcción de estos espacios ayuda a reducir l efecto de isla de calor, el cual es el fenómeno que se produce en las zonas urbanas que experimentan temperaturas más altas que las zonas circundantes debido a la actividad humana.
“Lima está construida sobre un desierto, la demanda de agua que necesitamos es alta. Al ser una zona desértica tenemos muy poca vegetación natural y eso es un problema para la población. Las personas necesitan las áreas arboladas porque son capaces de absorber la contaminación del aire. En Lima tenemos muy pocas áreas verdes y las que tenemos están mal cuidadas” , menciona Ian Vázquez, jefe de la Red Peruana Ciclo de Vida y Ecología Industrial (PELCAN PUCP).
La Organización Mundial de la Salud establece que se debe contar como mínimo con 9 metros cuadrados de áreas verdes por habitante. Sin embargo, en el Lima la mayoría de los distritos no cumplen con esta medida. Si bien los techos verdes pueden ayudar a las personas, no son una solución para reemplazar las áreas verdes por habitantes. “Tener techos urbanos va a ayudar a que se absorba más contaminación, a que los edificios reduzcan su temperatura”, menciona Ian.
La diferencia entre zonas urbanas que cuenten con vegetación y otra en la que solo haya concreto puede ser de23 grados más alta de lo que debería si no hay áreas verdes, si bien suena poco, puede ser la diferencia entre sufrir un golpe de calor o no en personas vulnerables. “El tener vegetación urbana reduce la temperatura de manera drástica”, asegura Ian.
La diferencia entre zonas urbanas que cuenten con vegetación y otra en la que solo haya concreto puede ser de23 grados más alta de lo que debería si no hay áreas verdes, si bien suena poco, puede ser la diferencia entre sufrir un golpe de calor o no en personas vulnerables. “El tener vegetación urbana reduce la temperatura de manera drástica”, asegura Ian.
Si bien tener zonas con césped es beneficioso para la población, lo que realmente va a reducir la temperatura son los árboles. Sin embargo, al ser Lima un desierto se deben buscar especies arbóreas que no sean altamente demandantes de agua, para así generar un balance entre tener sombreado y que los árboles se adapten a las condiciones climáticas de la ciudad.
Finalmente, el desarrollo de techos verdes no es la única manera de reducir la temperatura interna de una vivienda. Algo simple como pintar la vivienda de blanco puede presentar una gran diferencia ya que mitiga el calor. “Esta técnica se utiliza en las playas de San Bartolo o en las ciudades y pueblos de Andalucía o las islas griegas. No es una casualidad que esas viviendas estén pintadas de blanco”, finaliza Ian.