Miguel Mejía, Gonzalo Vizcarra e Ian Riofrío, ingenieros mecatrónicos egresados de la PUCP, lideran Enova, una startup recientemente reconocida como ganadora del concurso Startup Perú 11G de ProInnóvate, en la categoría Emprendimientos Dinámicos.
“Nuestro objetivo es democratizar el acceso a herramientas y conocimientos técnicos, para que más personas puedan desarrollar prototipos de hardware sin las barreras tradicionales de infraestructura, herramientas, conocimiento o inversión”, explica Miguel.
Su propuesta consiste en ofrecer un espacio equipado con tecnología de manufactura, asesoría personalizada y soporte técnico para cubrir todo el proceso de diseño, desarrollo y fabricación de productos físicos, con especialización en sistemas embebidos que integran microelectrónica.
La empresa trabaja bajo dos modalidades: los usuarios pueden acceder a su espacio colaborativo para desarrollar sus propias ideas, o encargar al equipo de Enova todo el proceso, desde la factibilidad, fabricación de un MVP y producción final. “Queremos que desde un estudiante sin experiencia hasta una empresa con décadas en el mercado puedan materializar una idea con nosotros”, señala Ian.
Ese enfoque fue clave para ganar el fondo de Startup Perú. El equipo presentó un plan de crecimiento centrado en ampliar su capacidad operativa, consolidar su modelo de coworking de la fabricación y lanzar productos educativos dirigidos a estudiantes universitarios de todo el país.
“Hicimos todo lo posible para postular con el mejor pitch y una propuesta sólida. Ganar este fondo no solo significa más recursos, también representa una validación importante del ecosistema de innovación. Nos pone en una nueva vitrina”, comenta Miguel.
Enova planea triplicar su línea de producción, incorporar nuevas tecnologías y establecer alianzas estratégicas con actores del sector industrial y académico. En ese sentido, ya han iniciado conversaciones con la PUCP, específicamente con la coordinación de la carrera de Ingeniería Mecatrónica. “Como exalumnos, queremos volver a nuestra casa de estudios para contribuir. No solo desde el negocio, sino también desde la educación”, afirma Gonzalo Vizcarra.
Una de sus principales apuestas a mediano plazo es el desarrollo de cursos técnicos y talleres virtuales en español, con contenidos accesibles y estructurados. “Muchos alumnos y profesionales quieren aprender, pero no saben por dónde empezar. Y si no sabes inglés, el camino se vuelve más cuesta arriba. Queremos cerrar esa brecha”, explica Ian.
El objetivo de Enova es convertirse en un referente nacional en fabricación colaborativa y accesible. Desde allí, escalar hacia Latinoamérica con sedes físicas o modelos tipo franquicia. “Nuestra idea es eliminar barreras y democratizar la manufactura moderna. Quitar la excusa del ‘no tengo herramientas’ o ‘no sé cómo empezar’. Queremos que cualquiera pueda fabricar un producto de alto nivel en Perú y sentirse respaldado”, señalan.
Finalmente, el equipo busca inspirar a más estudiantes a emprender. “Muchos creen que el único camino es terminar la carrera y entrar a una empresa. Pero el emprendimiento también es una opción válida, potente y transformadora. No basta con saber programar o diseñar: hay que saber comunicar, gestionar, vender tu idea. Las habilidades blandas son igual de importantes”, concluye Gonzalo.